“De un desierto de inversión en 2013 empezó a llover… y continúa este año”. En el mercado inmobiliario la inversión realizada por fondos, capital riesgo y entidades financieras durante el año pasado fue 12 veces superior a la realizada en 2012, según el informe de inversión en el mercado inmobiliario en España en 2013. Las compras en el sector se centraron en operaciones de deuda con colateral inmobiliario, activos inmobiliarios y plataformas de servicing.

 

El importe transaccionado en 2012 de 433 millones de euros pasó a 5.211 millones en el año siguiente. “Los fondos internacionales  pasaron de un desinterés total por nuestro país a un llamada en masa, invirtiendo así el cambio de tendencia. Hemos pasado de ser invisibles a ser inmprescindibles. Y esto no ha hecho más que empezar”, apunta Mikel Echavarren, CEO de irea en una convocatoria.

 

Del volumen total de operaciones en el sector inmobiliario en 2013, un 11% correspondieron a transacciones de vivienda residencial, que supusieron 576 millones de euros. La actividad en el mercado de la Sareb y otras Administraciones Públicas se incrementó hasta representar en 33% de la actividad para vender por un total de 1.737 millones de euros, que junto con los 1.919 millones vendidos por las entidades financieras representaron un 70% del volumen total de las operaciones. “De un año a otro se ha diversificado la estrategia de los fondos por el enorme volumen de dinero que tienen para invertir”, explica Echavarren. “Empezaron por el mercado industrial y luego pasaron a comprar vivienda social, apartamentos turísticos e incluso paquetes de viviendas inacabadas y suelo en tan solo ocho meses”, concluye.

 

No obstante, las expectativas para 2014, son más realistas. “No creemos que en 2014 vayan a repuntar las compraventas de pisos en el mercado residencial, tiene que haber más financiación y dinero y aún no hay suficiente demanda. Este año solo se sentarán las bases”, reconoce el CEO de irea. No obstante, señala que a finales de 2014, las viviendas residenciales en la costa, las residencias de estudiantes y de tercera edad aparecerán como nuevos productos de inversión para estos fondos. “La vivienda terminada en alquiler, social o no, y la vivienda turística en primera línea de playa es el negocio que más les interesa a estas entidades básicamente porque su público no es nacional”, declara Echavarren. Asimismo, reconoce que la debilidad del consumo interno se mantendrá durante la mayor parte de 2014, lo que seguirá dificultando la reactivación de la venta de promociones de carácter residencial.

 

 

Origen: Elmundo