Tras la mudanza de los empleados de la entidad financiera a la nueva sede en Las Tablas (Madrid), el emblemático edificio del Paseo de la Castellana se va a remodelar. Además, por primera vez en su historia busca un nuevo inquilino - desde su construcción y hasta hace apenas una semana, el 30 de septiembre, ha albergado la sede del BBVA.
La inmobiliaria GMP acomete ahora su rehabilitación y va a invertir en la reforma 30 millones de euros. Las actuaciones prevén un plan de renovación de los espacios interiores e instalaciones, así como un programa de medidas para mejorar la eficiencia del inmueble, para reducir el consumo energético y de agua hasta en un 50%, según el propietario. Contará con 2.000 metros cuadrados destinados a distintos servicios para las futuros empleados.
La torre, diseñada en 1971 por Francisco J. Sáenz de Oiza, arquitecto que recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, se construyó en Azca entre 1978 y 1981 como sede del Banco Bilbao.
Gmp ha seleccionado a la firma Ruiz Barbarín Arquitectos- ARQUIMANIA como responsable de la rehabilitación de Castellana 81, de las obras se encargará OHL.
Las consultoras CBRE y Aguirre Newman han sido seleccionadas por Gmp para buscar el inquilino.
“Alguna gran empresa de reconocido prestigio ha manifestado ya interés en el edificio”, asegura Xabier Barrondo, director general de negocio de Gmp, una empresa que está participada por GIC, el fondo soberano de Singapur. “Castellana 81 es un edificio de oficinas único en Madrid por su singularidad, privilegiada ubicación”, añade.
Castellana 81 tiene 107 metros de altura, distribuidas en 28 plantas de oficinas, y 38.000 metros de superficie. Con una superficie tipo de 1.325 metros cuadrados, las plantas son libres, abiertas en torno al núcleo central de ascensores y servicios. Por ello, destacan por su capacidad de modulación, que permite una gran variedad de implantaciones.
El edificio tendrá una dotación de 411 plazas de 'parking', aproximadamente una plaza por cada 90 metros cuadrados.